Inés Arregui

El síntoma como reencuentro con tu verdadero ser

Soy psicóloga psicoterapeuta con 14 años de experiencia profesional, especializada en psicoterapia integrativa

ejerciendo como
psicóloga profesional

Hablo castellano,
francés e inglés

Satisfacción
de los clientes

Formación y
supervisión continua

MI ENFOQUE

Psicoterapia integrativa

Es posible que
no quieras verme

Es posible que una parte de ti sienta nervios o que te dé vergüenza llegar a una consulta y hablar de ti. Quizás ni siquiera sepas por dónde empezar o no creas que tengas razones para acudir a una psicóloga, porque tus problemas tampoco son para tanto.
A esa parte de ti quiero decirle que es lógico que haya nervios e incluso vergüenza. Al fin y al cabo, no me conoces, no sabes si soy una persona segura o no. También es lógico que no sepas por dónde empezar, seguro que tienes muchas cosas que contar y te resulta difícil ordenarlas en tu cabeza (más aún si sientes nervios o vergüenza).
Mi propuesta es que me dejes a mí el trabajo de ayudarte con la vergüenza, con los nervios, con la ordenación de tus ideas.

Mi tarea consiste en hacerte sentir la confianza suficiente para hablar conmigo.

¿O en el fondo quizás sí quieras?

Si te planteas iniciar un proceso de psicoterapia, a lo mejor es porque otra parte de ti se ve sobrepasada por los síntomas o las emociones del día a día y ya no sabe qué hacer con ellos, ni con quién hablar. Y por mucho que busque respuestas en vídeos, en redes sociales o libros de autoayuda, no acaba de sentir ese bienestar que anhela. En última instancia, tú eres quien sabe mejor que nadie (incluida yo) cuando necesitas ir a terapia. Si has decidido dar el paso, seguro que tus razones son válidas.

A mí sólo me queda darte la bienvenida.

Por cierto, te atiendo en castellano, en francés o en inglés (también en spanglish y frañol).
¡Tú eliges el idioma!

Una historia detrás de cada síntoma

Detrás de una dolencia física sin causa aparente, una melancolía teñida de desaliento, pensamientos negativos constantes o una obsesión que no deja respirar siempre se esconde una buena razón. Cada síntoma oculta una historia a menudo difícil de contar. Suele tratarse de una historia compleja, entretejida de episodios y anécdotas que pocos han sabido escuchar. No es fácil sacarla a la luz, porque está enterrada en las profundidades del inconsciente y es necesario escarbar para encontrarla.
Cada historia posee un color, un aroma y un toque distinto. Cada una tiene un ritmo y un sabor que le son propios. Cada historia, en este sentido, es única. Pero todas tienen algo en común: todas piden a gritos ser escuchadas y reconocidas en su verdad.

¿Cómo te puedo ayudar?

Es posible que
no quieras verme

Es posible que una parte de ti sienta nervios o que te dé vergüenza llegar a una consulta y hablar de ti. Quizás ni siquiera sepas por dónde empezar o no creas que tengas razones para acudir a una psicóloga, porque tus problemas tampoco son para tanto.
A esa parte de ti quiero decirle que es lógico que haya nervios e incluso vergüenza. Al fin y al cabo, no me conoces, no sabes si soy una persona segura o no. También es lógico que no sepas por dónde empezar, seguro que tienes muchas cosas que contar y te resulta difícil ordenarlas en tu cabeza (más aún si sientes nervios o vergüenza).
Mi propuesta es que me dejes a mí el trabajo de ayudarte con la vergüenza, con los nervios, con la ordenación de tus ideas.

Mi tarea consiste en hacerte sentir la confianza suficiente para hablar conmigo.

¿O en el fondo quizás sí quieras?

Si te planteas iniciar un proceso de psicoterapia, a lo mejor es porque otra parte de ti se ve sobrepasada por los síntomas o las emociones del día a día y ya no sabe qué hacer con ellos, ni con quién hablar. Y por mucho que busque respuestas en vídeos, en redes sociales o libros de autoayuda, no acaba de sentir ese bienestar que anhela. En última instancia, tú eres quien sabe mejor que nadie (incluida yo) cuando necesitas ir a terapia. Si has decidido dar el paso, seguro que tus razones son válidas.

A mí sólo me queda darte la bienvenida.

Por cierto, te atiendo en castellano, en francés o en inglés (también en spanglish y frañol).
¡Tú eliges el idioma!

Una historia detrás de cada síntoma

Detrás de una dolencia física sin causa aparente, una melancolía teñida de desaliento, pensamientos negativos constantes o una obsesión que no deja respirar siempre se esconde una buena razón. Cada síntoma oculta una historia a menudo difícil de contar. Suele tratarse de una historia compleja, entretejida de episodios y anécdotas que pocos han sabido escuchar. No es fácil sacarla a la luz, porque está enterrada en las profundidades del inconsciente y es necesario escarbar para encontrarla.
Cada historia posee un color, un aroma y un toque distinto. Cada una tiene un ritmo y un sabor que le son propios. Cada historia, en este sentido, es única. Pero todas tienen algo en común: todas piden a gritos ser escuchadas y reconocidas en su verdad.

¿Cómo te puedo ayudar?

Es posible que
no quieras verme

Es posible que una parte de ti sienta nervios o que te dé vergüenza llegar a una consulta y hablar de ti. Quizás ni siquiera sepas por dónde empezar o no creas que tengas razones para acudir a una psicóloga, porque tus problemas tampoco son para tanto.
A esa parte de ti quiero decirle que es lógico que haya nervios e incluso vergüenza. Al fin y al cabo, no me conoces, no sabes si soy una persona segura o no. También es lógico que no sepas por dónde empezar, seguro que tienes muchas cosas que contar y te resulta difícil ordenarlas en tu cabeza (más aún si sientes nervios o vergüenza).
Mi propuesta es que me dejes a mí el trabajo de ayudarte con la vergüenza, con los nervios, con la ordenación de tus ideas.

Mi tarea consiste en hacerte sentir la confianza suficiente para hablar conmigo.

¿O en el fondo
quizás sí quieras?

Si te planteas iniciar un proceso de psicoterapia, a lo mejor es porque otra parte de ti se ve sobrepasada por los síntomas o las emociones del día a día y ya no sabe qué hacer con ellos, ni con quién hablar. Y por mucho que busque respuestas en vídeos, en redes sociales o libros de autoayuda, no acaba de sentir ese bienestar que anhela. En última instancia, tú eres quien sabe mejor que nadie (incluida yo) cuando necesitas ir a terapia. Si has decidido dar el paso, seguro que tus razones son válidas.

A mí sólo me queda darte la bienvenida.

Por cierto, te atiendo en castellano, en francés o en inglés (también en spanglish y frañol). ¡Tú eliges el idioma!

Una historia detrás
de cada síntoma

Detrás de una dolencia física sin causa aparente, una melancolía teñida de desaliento, pensamientos negativos constantes o una obsesión que no deja respirar siempre se esconde una buena razón. Cada síntoma oculta una historia a menudo difícil de contar. Suele tratarse de una historia compleja, entretejida de episodios y anécdotas que pocos han sabido escuchar. No es fácil sacarla a la luz, porque está enterrada en las profundidades del inconsciente y es necesario escarbar para encontrarla.
Cada historia posee un color, un aroma y un toque distinto. Cada una tiene un ritmo y un sabor que le son propios. Cada historia, en este sentido, es única. Pero todas tienen algo en común: todas piden a gritos ser escuchadas y reconocidas en su verdad.

¿Cómo te puedo ayudar?

INÉS ARREGUI

Quién soy

Crecí en un ambiente multilingüe. De padre español y madre francesa (mi segundo apellido es Guivarc’h), pasé varios años de mi infancia en Londres, donde aprendí inglés. Después de una crisis personal que me llevó a iniciar un proceso de terapia, y a pesar de que disfrutaba mucho con el estudio de los idiomas, me di cuenta de que la psicología me apasionaba todavía más.

Saber más

¿Cómo te puedo ayudar?

Síntomas con los que trabajo

 Estrés y ansiedad

Crisis existenciales

Rupturas de pareja

Duelos

Baja autoestima

Traumas

Obsesiones

Fobias

Somatizaciones

Dificultades en las relaciones

Contáctame
El síntoma como reencuentro con tu verdadero ser

Testimonios de clientes

“Gracias a Inés pude reanudar mis ganas de vivir”.

Sandra, 35 años

“Old patterns that seemed so ingrained and stuck suddenly begin to loosen and shift” (Los antiguos patrones que parecían estar tan incrustados y atascados de repente comienzan a soltarse y cambiar).

Grainne, 29 años

“Siempre he sido una persona tímida en mis relaciones sociales. Ahora he aprendido en parte a aceptarme y quererme como soy. Pero también a permitirme ser más yo con los demás y sentirme más relajado. Gracias Inés”.

Javier, 45 años

“Me gustaría agradecer a Inés su infinita paciencia y su delicada y respetuosa manera de tratarme. Para mí Inés es la mejor terapeuta posible, súper recomendable porque realizarás cambios de verdad”.

Cristina, 22 años

“Acudí a terapia porque mi ansiedad había tomado las riendas de mi vida. Inés me ofreció siempre un rincón donde sentirme cómodo y en el que aprendí a conocerme y a saber cómo y de dónde venían esos miedos desbocados. Gracias a su ayuda, escucha y atención conseguí manejarlos y vivir de una manera más libre y consciente.”

Juan Pablo, 35 años

I initially wanted to come to therapy to deal with some anxiety that I was experiencing in multiple areas of my life. Inés has been extremely supportive, helpful and proactive in working with me, all within a comfortable environment, to get to the root of some of the issues. As a result of our sessions together, I have been able to rationalise certain fears and we have also worked on some key strategies to help me when these feelings of anxiety arise.

Celia, 23 años

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